Wednesday, April 03, 2013

Mirar el pajarito


Hacía un tiempo que le venía dando vueltas al tema y creo que ha llegado el momento. Llega el momento de simplemente "Mirar el pajarito". Me explicaré. Y me explico en mi blog aunque me encantaría hacerlo en Twitter, pero tengo tanto que decir y que contar que los 140 caracteres me dan para muy poco.
Comencé en twitter en verano del 2010. Era una mañana en el antiguo hospital La Fé y estaba cuidando a mi padre, quien por aquel entonces comenzaba la fase terminal de su enfermedad. El caso es que una de esas mañanas me abrí una cuenta de twitter.
 Lo recuerdo perfectamente. Uno de los primeros en darme la bienvenida fue Pablo García Cuervo, @GarcíaCuervo (en aquel momento recién llegado del Mundial de Sudáfrica). Pronto, muy pronto quedé atrapado por esta herramienta. Instantánea, inmediata, brillante. Que permite desde compartir información, a pasar un rato agradable si simplemente lo pretendes.
 En la parte negativa pronto aparecieron los trolls. Y aclaro que para mi un troll es quien viene a hacer ruido. Insultar, faltar al respeto o mentir de manera deliberada es su modus operandi habitual. Gente que te descalifica (a ti o a tu actividad profesional) sin conocerte de nada. Buscando su minuto de gloria en la vida. Pues bien, seis mil y pico followers y un buen puñado de ratos después, les felicito. Reconozco que me han ganado la batalla. Que twitter es el patio del colegio donde ejercen como matones y les entrego el bocadillo. Me voy a dedicar a dar un paso a un lado. Sólo observaré. Por el momento sólo "miraré el pajarito". Es decir, llega el momento de hacerme a un lado por un tiempo y abandonar esto. La gota que ha colmado mi paciencia es ver como cuatro han tejido otra mentira más sobre mí y otros (imagino que sin mala fé, pero confundidos), les han creído.
Tras quejarme de los trolls el jueves 28 en la Taula (jamás dije que la afición del Valencia o que quienes apoyaran a #salvemosalvalencia lo fueran), algunos se aprestaron a decir que insulté llamando "desfaenats" (palabra que sí empleé, y vocablo muy utilizado en valenciano para llamar a alguien "ocioso") a la afición del Valencia y que les falté al respeto.
 A ese punto quiero aclarar que ni he faltado, ni faltaré jamás al respeto a la que considero mayor patrimonio del Valencia CF: su afición. Que no he faltado ni faltaré al respeto a grupos como #salvemoselvalencia, ya que quieren lo mejor para el Valencia y ello merece todo mi respeto. Y que lógicamente no llamé trolls ni desfaenats a todos los que participaron del TT #salvemosalvalencia. Sólo me referí a los que insultan y faltan al respeto. También aclararé que quien insulta o mantiene la actitud fascista de sólo contemplar y permitir su manera de pensar,, más la búsqueda de su minuto de gloria en la vida desde el anonimato, más unas dósis de ociosidad (un desfaenat), ése SÍ es un troll. De ello no me retracto.
Cómo muestra de lo que dije, he aquí el audio de aquella noche...

Audio Taula día 28



 Pero lo que tampoco voy a tolerar es que se esté manchando el trabajo de toda nuestra gente. Hemos llegado a un punto en el que si no dices lo que alguno quiere oir, eres un "comprado", "te unta fulano" ó haces "campaña". Son los primeros que cuando les bloqueas, piden respeto y libertad (como decía mi querido padre "justicia, pero no por mi casa") Y, lo reconozco. Posiblemente, yo no he gestionado bien estas cosas.
He intentando hablar con todo el mundo ("estás perdiendo el tiempo", me decía alguno). He vacilado a quien ha venido a vacilarme (siempre me hizo gracia que entraran a vacilarte, y cuando les respondías con su propia medicina se indignaban. -como un conductor que va por ahí pitando a todo el mundo y se sorprende que le piten-).
En definitiva, he intentado estar cerca de la gente, con mis errores (los ha habido, indudable), y mis aciertos. Pero sobre todo, con buena fe. Así que llega el momento de dar un paso al lado y mirar el pajarito. Llega el momento de dejar twitter por un tiempo. De ser un observador silencioso. De reir con lo que me guste, y discrepar de lo que no. Pero desde un segundo plano. Llega el momento de abandonar por un tiempo twitter. Lo necesito. No me gusta en lo que se ha convertido esto. Soy más de hablar y de atenderos. De ahí a tener que aguantar a diario ciertas actitudes, media un abismo.
Gracias a todos los que habéis querido interactuar conmigo y disculpas a los que por unas causas u otras no os haya podido atender. Llega el momento de marcharme. De hacerme a un lado. Hasta pronto (o no...)


 PD: sólo voy a decir una cosa más. El valencianismo se adentra en terrenos complicados y hace falta la unión más que nunca. Y la unión no es pensar todos igual. Es escuchar a la persona que tienes a tu lado, aunque piense diferente a ti. Respetarla y no descalificarla por discrepar, y entender que (al igual que tú) quiere lo mejor para el Valencia aunque penséis diferente. Estando todos juntos, el camino y sus penurias se harán más cortas.